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Como criar a las hijas

Ahora, el Dr. Dobson presenta su muy esperado libro compañero: Cómo criar a las hijas. Basado en años de extensa investigación y preparado con el sello del enfoque realista del Dr. Dobson, Cómo criar a las hijas equipará a padres como usted para enfrentar los retos de criar a sus hijas, a fin de que se conviertan en mujeres saludables, felices y exitosas que superen los desafíos específicos para las niñas y mujeres de hoy, y para que a su debido tiempo destaquen en la vida.

Crianza de niños y niñas: Diferencias entre ellos y ellas

Parte I

Para Melinda Araneda criar a su hija después de tener un niño no fue fácil. Orana era mucho más inquieta que Boris. Había que estar pendiente de ella todo el día; sin embargo, reconoce que su hija era mucho más independiente y adelantada para todo, hasta para ponerse de pie y caminar.

Todo lo contrario le pasó a Rebeca Correa con su hijo José Pablo. Su hijo era mucho más inquieto que María José, “corría siempre sin parar detrás de la pelota mientras que mi hija era un ‘papel’ a su lado”.

Catalina Maluk tiene 4 hijos, 2 mujeres y 2 hombres. Ella también reconoce algunas diferencias entre ellos y ellas. “Al nacer los hombres fueron mucho mejores para tomar papa y me despertaban a las 4 de la madrugada, mientras que las niñitas dormían toda la noche. Ahora más grandes, las niñas son exigentes con la ropa y a ellos no les importa para nada. En las emociones, ellas son más sensibles que ellos, diría cíclicas; y los niños ellos más inquietos y buenos para hacer embarradas”.

Todas coinciden que sintieron la diferencia entre hijos hombres y mujeres desde que nacieron. Pero ¿cuán diferentes son en realidad? Hay estigmas que dicen que ellos son más rudos y ellas más responsables, y que ellos son más ariscos y ellas más cariñosas. Incluso, llegado un minuto de sus vidas niños y niñas piensan distinto y juegan diferente.

Las diferencias de nacer XX o XY

En el siglo XVIII los científicos estaban convencidos de que en el cerebro de las mujeres dominaban zonas reservadas al amor y a la ternura, y que en el de los hombres las reservadas a la creatividad y agresividad. En el XIX, los estudiosos aseguraban que los sistemas arteriales, responsables de la irritabilidad, imperaban en el hombre mientras que los venosos y ganglionares, artífices de la sensibilidad, la plasticidad y las cualidades morales, en la mujer. Muchos estudios similares a lo largo del tiempo han justificado las diferencias entre sexos, hasta que en 1974, Maccoby y Jacklin se dedicaron a analizar y cruzar los resultados de 1.600 estudios sobre el tema. Los investigadores concluyeron que las semejanzas entre ambos sexos superaban con creces las diferencias.

Sin embargo, la psicóloga clínica infanto-juvenil docente de la Universidad Central, Gloria Chanes, explica que los niños tienen también una diferencia hormonal y genética. “Las mujeres son XX y los hombres XY, por lo tanto, el desarrollo de los hemisferios es distinto. A su vez, las hormonas juegan un papel importante que se hace muy presente en la pubertad. Estudios que dicen que la manera de pensar de ellos y ellas es diferente, y que las niñas tienen pensamiento más detallista, mientras que el de los hombres más macro”, asegura la profesional.

En 1995, un experimento del doctor Ruben Gur, del Laboratorio de Comportamiento Cerebral de la Universidad de Medicina de Pensilvania (EE UU), estudió la actividad cerebral de 37 hombres y 24 mujeres, descubriendo que existen diferencias en la actividad metabólica neurológica de unos y otras en 17 zonas cerebrales. Esto podría explicar la mayor agresividad de los hombres o la facilidad de las mujeres para expresar sus sentimientos y dominar el lenguaje.

En general, la psicóloga Chanes dice además, que los niños tienen un desarrollo biológico y psíquico, de las emociones y los afectos, más lento que las niñas, lo que los hace madurar más tardíamente. Pero también existen rasgos diferenciadores que no se explican biológicamente, sino por influjos culturales y educativos. La psicóloga con experiencia en terapia infantil, Ximena Soto, reconoce que “además de las diferencias, la cultura también juega un rol importante que no se puede obviar y que es transmitida desde nuestros padres”.

Fuente Original: http://www.padresok.com/paginas/ver_nota.cfm?TipoVisor=detalle&ObjectId=5CB0EFA6-80BC-49E9-A35ADEBF7B9EC7D4